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21, 22 y 23 de Mayo 2024
21, 22 y 23 de
MAYO de 2024

- FECHAS CONFIRMADAS -

Las navieras españolas invierten 1.300 millones en renovar la flota

La antigüedad media pasa a ser de 12,6 años, frente a la mundial, de 18,7

Las empresas navieras españolas habrán invertido en el bienio 2010-2011 en torno a 1.300 millones de euros en la renovación de la flota con pabellón nacional, un esfuerzo considerado relevante dada la situación de crisis económica generalizada que afecta a las empresas de casi todos los sectores.
Este cuantioso desembolso, repartido en unos 1.045 millones en el 2010 y otros 300 millones de euros en este ejercicio, ha supuesto, por lo demás, un rejuvenecimiento importante de la edad media de la flota española -toda ella inscrita en el Registro Especial de Canarias (REC)-, compuesta en este momento por cerca de 150 naves de todas las tipologías.
Gracias a este volumen de inversiones, la antigüedad media es de 12,6 años, con un descenso sensible respecto a los 13,1 años de finales del 2009, y notablemente inferior al promedio mundial, de 18,7 años. España ocupa el puesto 23 de la clasificación mundial de flotas por país de bandera, que lidera Panamá, seguida de Liberia y de Islas Marshall. En la UE, el liderazgo es para Holanda, seguida de Francia y de Bélgica.
Según se desprende de un cruce de las estadísticas de la Asociación Nacional de Navieros de España (Anave), presidida por Adolfo Utor; de la Asociación de Armadores Europeos, que encabeza el español Juan Riva (Grupo Suardíaz), y de la Gerencia del Sector Naval (Ministerio de Industria), los diez buques de nueva incorporación son ferris, cementeros, para el transporte de gas LNG, para cargas rodantes (ro-ro) y buques tanque para productos petrolíferos.
Construcción naval
Dos de esta decena de nuevas unidades (Volcán del Teide y Volcán de Tinamar, ambos de 195 metros de eslora) fueron construidas en los astilleros privados gallegos, concretamente en Vigo, en el astillero Hijos de J. Barreras. En este momento, la industria naval privada pasa por una fuerte crisis de pedidos, por la combinación en el crítico descenso de la cartera de nuevos pedidos y por los problemas de contratación derivados de la paralización temporal del instrumento de bonificación fiscal llamado tax lease. (Fuente: LA VOZ DE GALICIA)