Los constructores gallegos, dispuestos a «estudiar» las oportunidades de negocio en Centroamérica
Fuentes del sector naval gallego admitieron haber mantenido un «contacto informal» con el jefe de la Oficina del Presidente mexicano Felipe Calderón, si bien definieron el encuentro como una diálogo «muy superficial» en el que se les manifestó el «interés del Ejecutivo centroamericano para que algunas de las empresas punteras puedan invertir allí». Portavoces de astilleros radicados en Vigo admitieron que el sector de la construcción naval privada atraviesa en Galicia «un momento muy dulce», con carteras de pedidos que aseguran en algunos casos la carga laboral hasta el año 2012. En la actualidad, las empresas gallegas acumulan pedidos para la construcción de 70 buques de acero, prácticamente la mitad de toda la actividad constructora de España. La estadística sitúa a Galicia con el 7% de la industria naval europea y el 1% del sector en todo el mundo.
«El interés que tiene para los astilleros gallegos irse hoy a México es relativo», afirmaron ayer algunos de los principales fabricantes. La demanda internacional de buques es amplia y obliga a los astilleros a ser selectivos en la aceptación de sus pedidos. «Hay muchas posibilidades de contratar y hay que analizar muy bien la rentabilidad del negocio antes de apostar por inversiones en el extranjero», comentaron los mismos portavoces.
No es la primera vez que México demuestra interés por la atracción de inversores gallegos en los campos naval, pesquero o de la industria transformadora de los productos del mar.
Pese a la petición de prudencia a la hora de valorar posibles acciones futuras, fuentes del clúster del naval se mostraron esperanzados en que futuros encuentros «en México o en España» con las autoridades del gobierno de Calderón permitan «analizar cifras concretas y prospecciones de mercado que hagan posible concretar acciones».
«Es innegable que podría haber un negocio en México», apuntaron las voces del naval gallego, «pero hay que estudiarlo detenidamente de manera bilateral». Con todo, el ofrecimiento de Juan Camilo Mouriño durante su fugaz estancia en Galicia es reconocido como «el comienzo de algo que podría resultar interesante». Otros sectores, como la conserva, ven también con optimismo posibles inversiones. (Fuente: La Voz de Galicia)
«El interés que tiene para los astilleros gallegos irse hoy a México es relativo», afirmaron ayer algunos de los principales fabricantes. La demanda internacional de buques es amplia y obliga a los astilleros a ser selectivos en la aceptación de sus pedidos. «Hay muchas posibilidades de contratar y hay que analizar muy bien la rentabilidad del negocio antes de apostar por inversiones en el extranjero», comentaron los mismos portavoces.
No es la primera vez que México demuestra interés por la atracción de inversores gallegos en los campos naval, pesquero o de la industria transformadora de los productos del mar.
Pese a la petición de prudencia a la hora de valorar posibles acciones futuras, fuentes del clúster del naval se mostraron esperanzados en que futuros encuentros «en México o en España» con las autoridades del gobierno de Calderón permitan «analizar cifras concretas y prospecciones de mercado que hagan posible concretar acciones».
«Es innegable que podría haber un negocio en México», apuntaron las voces del naval gallego, «pero hay que estudiarlo detenidamente de manera bilateral». Con todo, el ofrecimiento de Juan Camilo Mouriño durante su fugaz estancia en Galicia es reconocido como «el comienzo de algo que podría resultar interesante». Otros sectores, como la conserva, ven también con optimismo posibles inversiones. (Fuente: La Voz de Galicia)